Hogar Circular acompaña a las personas a vivir en sintonía con la naturaleza, de forma más sostenible y sin acumular tantos objetos. En definitiva, a tener una vida circular. Esto lo hace a través de actividades formativas y talleres, como el taller de telas enceradas. Las telas enceradas son una alternativa a productos de un solo uso como el film de plástico. En sus talleres, Hogar Circular acompaña en la creación de telas enceradas a partir de un kit muy práctico.

El reto de este proyecto era acercar los kits de telas enceradas al público de Hogar Circular, de la forma más sostenible posible. Estos kits permiten a cada persona usuaria realizar su propia tela encerada en casa. Incluyen todos los materiales necesarios (como la tela de algodón orgánico y la cera de abeja), y las instrucciones para realizarlo.

El proceso de diseño ha comenzado con el planteamiento de estrategias circulares para el producto, junto a la clienta y a los proveedores. Se identificó la ‘reutilización’ como un elemento estratégico para la narrativa del producto, por lo que esta estrategia circular se llevó al packaging.

Se realizaron distintos prototipos y se testearon junto con usuarias reales. Así, se identificó qué concepto funcionaba mejor para ellas, y cómo se podían incluir las instrucciones de la forma más accesible y sostenible.

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El diseño final del packaging incluyó las siguientes estrategias circulares. En primer lugar, la reutilización, ya que es un concepto también presente en las telas enceradas. El diseño estructural facilita su reutilización para el mismo uso que tuvo, o para otros usos. Estas opciones de reutilización se incluyen en la comunicación del producto, animando a las usuarias a ser creativas y encontrar otras soluciones también. Por otro lado, para proteger el producto durante el transporte se han incluido virutas de cartón sobrantes del propio proceso de fabricación.

En segundo lugar, el packaging es mono-material, de manera que, en caso de acabar sus múltiples vidas útiles, pueda ser más fácilmente reciclado. Además, se han empleado tintas vegetales para el diseño gráfico, de forma que se facilita un reciclaje con el mejor impacto.

Por último, para ahorrar material impreso y favorecer la actualización de las instrucciones y el contenido explicativo del producto, esta información se ha digitalizado. El packaging incluye un QR con acceso a un PDF interactivo, pensado para ser accesible, comunicar los posibles usos del producto y ampliar las instrucciones. Además, el PDF incluye ilustraciones explicativas de cada punto, y un enlace a un vídeo donde la clienta explica todo el proceso.

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